La lluvia de las Perseidas, Lágrimas de San Lorenzo

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La Luna aguará la fiesta de las Perseidas

El brillo de la Luna puede ocultar un 40% de las estrellas fugaces
Los expertos recomiendan abarcar la máxima cantidad posible de cielo
La mejor hora para ver la lluvia será el sábado a las 5 de la mañana

Como cada año a mediados de agosto podremos disfrutar de uno de los espectáculos astronómicos más importantes y vistosos, la lluvia de las Perseidas.

Las lágrimas de San Lorenzo es la lluvia de estrellas más conocida por el público. Este año su apogeo será durante la noche de este viernes 12 al sábado 13, cuando se esperan que caigan unos 100 meteoros a la hora.

Este espectáculo se verá empañado (o mejor dicho, iluminado) por la presencia de la luna llena. El brillo de nuestro satélite puede tapar a las estrellas fugaces más débiles.

"La Luna impedirá la visión de un 30% o 40% de las estrellas fugaces, en un cálculo estimativo" afirma Miquel Serra, administrador del observatorio del Teide e investigador del Instituto Astrofísico de Canarias (IAC) en declaraciones a RTVE.es.

Las previsiones meteorológicas para esa noche anuncian cielos poco nubosos en la mayoría de España, pero en la zona centro puede haber chubascos, y en Canarias el cielo estará nuboso en las islas de mayor relieve.

Por si acaso no pudieramos disfrutar en vivo de la lluvia de estrellas por culpa del tiempo, la NASA conectará en directo una webcam con la que podremos seguir las lágrimas de San Lorenzo con un solo clic.

Justo antes del amanecer

El apogeo de las Perseidas se producirá entre las 3:00 y las 15:30 del sábado (hora peninsular). Los astrónomos aseguran que el mejor momento de observación se producirá entre las 5:00 y las 6:00 de la mañana, poco antes del amanecer.

En ese momento la constelación de Perseo, la zona de donde provienen los meteoros, estará en su punto más alto en el cielo y la Luna a punto de ocultarse, con lo que las condiciones de observación serán óptimas.

Sin embargo, durante la noche, la constelación de Perseo va a estar en una posición relativamente baja en el cielo.

"Debido a esto vamos a poder ver bastantes bólidos, que son fragmentos que pasan rozando la atmósfera. Tienen un trazo más largo y brillante" explica Serra.

Abarcar la máxima cantidad de cielo

"Es un fenómeno global, así que las estrellas fugaces vendrán de todas partes, por ello es importante abarcar la máxima cantidad de cielo" asegura Serra.

Es conveniente no tener ningún objeto que pueda tapar la visión del cielo, tales como edificios o montañas. Por supuesto también es recomendable alejarse de las zonas iluminadas.

Se calcula que en zonas con mucha contaminación lumínica, como en Madrid, la media de estrellas fugaces que puedan verse durante la noche esté alrededor de 15 ó 20 por hora.

Los expertos también recomiendan situarse en posiciones elevadas, que permitan a los observadores estar por encima de polvo y otros obstáculos que dificulten la visión.

Para disfrutar de la lluvia de estrellas no es necesario el uso de prismáticos o telescopios.

Restos de un cometa

Las Perseidas son en realidad restos del cometa Swift-Tuttle, un objeto que orbita el Sol cada 133 años. Cuando un cometa se acerca al Sol la radiación de la estrella provoca que fragmentos de su superficie y núcleo se desprendan y queden flotando en el espacio.

Cuando la Tierra atraviesa la órbita del cometa se encuentra con estos restos. Estos pequeños trozos entran en la atmósfera y se consumen mucho antes de que impacten contra la superficie.

La Tierra atraviesa la órbita del Swift-Tuttle entre mediados de julio y finales de agosto, y es en esta época cuando se produce la lluvia de estrellas.

El nombre de Perseidas se debe a que el radiante del fenómeno es la constelación de Perseo. El radiante en astronomía es la zona de la que parecen venir los meteoros

Aunque las Perseidas son la lluvia de estrellas más conocidas, no son las más prolíficas en lo que se refiere a estrellas fugaces por hora. Las Gemínidas (a mediados de diciembre) y las Cuadrántidas (a principios de enero) son las que tienen mayor tasa de estrellas fugaces por hora, con 120 cada una.

Sin embargo, al producirse en verano, cuando las condiciones climatológicas favorecen la observación, las Perseidas se han convertido en la lluvia de estrellas más conocidas y seguidas.

rtve.es
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